lunes, 9 de noviembre de 2009

Algo dentro de mí


Algo dentro de mí está cambiando, lo noto en mis sábanas plegadas, en la nevera llena, en las conversaciones con las cajeras, hola, buenos días, buenas, cómo va todo, bien, por aquí, cuidándome un poquito, qué gran día hace hoy, sí, espléndido, hasta luego, gracias, de nada, hasta luego, ciao, guapa, ¿¡cómo!? nada, dije guapa, ¿y eso? No sé, pasó, sin más, pero si ni siquiera me miraste a la cara, cómo que no, sí lo hice, no, no lo hiciste, perdón, no quise incomodarte, no me incomodaste, me gustó lo que dijiste, pero ahora tengo que dejarte, ya sabes, el trabajo me llama, adiós, nos vemos, ciao, guapo, caminando hacia mi casa reflejando mi estupidez en los escaparates del centro, no sería el primer hombre que lo consigue, no es tan peligroso como puede parecer a simple vista, me lo cuentan mientras imito a los tipos de la revista, sonriendo a un cámara imaginaria, nadie escribe un libro si está en paz consigo mismo, digo con el rictus serio como si me fuera la vida en ello, luego viene una ovación cerrada, una multitud en pie aplaudiendo enfervorecida, he ganado el primer premio “Ciudad de Vacaciones”, diez sesiones de yoga y una semana en Benidorm, algo dentro de mí está cambiando, es posible incluso que al fin me convierta en un aventurero, grande y despistado, jugando con mariposas del tamaño de mi mano…

No hay comentarios: